Cuando entras en el mundo de la colaboración, desde el principio, ya sabes que esto solo acaba de empezar. Nuestro niño trajo a casa mucho amor. Lo más bonito de todo ha sido su evolución, y no me refiero a nivel individual, sino como un miembro más de la familia. Ya no es el niño tímido y distante que llegó el primer día, ahora es Nuestro Niño y viene a Su Casa. Para nosotros la colaboración nos ha adentrado en un maravilloso mundo desconocido hasta entonces en el que los niños y niñas tienen derecho a crecer en el seno de una familia. Para mí marido, mis hijos y para mí ha significado un crecimiento a nivel emocional enorme. Ahora somos 5 en vez de 4. Todo el amor que le damos se nos devuelve multiplicado por mil. Lo volveríamos a hacer una y otra vez y animo a todas las familias para que lo hagan. Una vez que entras, no querrás salir.